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Tejón Suárez, Josefa Ramona | Reseñas históricas | Geografía e historia | Campesinos | Pola del Pino | El Pino | Aller | Comarca de la Montaña Central | Centro de Asturias | Montaña de Asturias | Asturias | Principado de Asturias | España | Europa.
Descripción
En 1938, cuando los estertores de la Guerra Civil aún humeaban en Asturias, nació Ramona en «La Pola del Pino», concejo de Aller. Sus padres eran Aurelio y Jerónima, ambos alleranos. El padre era campesino, minero y aún sacaba tiempo para ejercer de barbero con sus vecinos y así obtener unos ingresos extras, tan importantes en esos años de escasez; la madre, como todas las mujeres del campo, trabajaba tanto o más que el hombre, cuidando la casa, atendiendo el ganado, cultivando la huerta, criando a la prole..., inculcando a sus hijos la importancia del trabajo y la aceptación del sacrificio como elemento indispensable en la vida rural.
La lección fue bien aprendida por sus cuatro hijos, de los que Ramona era la menor. Desde niña, colabora en las faenas de la casa, robando tiempo a lo que tanto le gusta, ir a la escuela, que abandona definitivamente a los catorce años, tras, como ella misma reconoce, «aprender las cuatro reglas que tanto sirven en la vida». Además de aprender lo básico, Ramona cose sábanas, borda a mano, practicando todo lo que le iba a resultar tan útil en su vida como mujer campesina.
Los años infantiles también son de diversión, y en compañía del resto de los niños de La Pola, juega al «escondelerite», al «cascayu», a la «pedriquina» y a otros juegos de la época. ¿A las muñecas?, no, Ramona no llegó a tener ninguna muñeca.
Con tan sólo 17 años, se hace novia de Antonio, que vive en Pelúgano y sólo tiene tres años más. Antonio sabe que su futuro está ligado a la hacienda familiar y al trabajo en el campo, por lo que Ramona, cuando acude en su compañía a los bailes que se celebran en Felechosa o el Llano (Collanzo), imagina su vida ligada al campo, y a todo aquello que ella ama y necesita: la ganadería, la huerta, la naturaleza.
La boda se celebra en la capilla de Pola del Pino, Ramona vestida de corto y de mantilla, Antonio, trajeado. La pareja inicia su vida en común en el hogar familiar de Ramona, que tiene sus primeros tres hijos (Chuso, Celso y Marisa) arropada por su madre. Siendo éstos muy pequeños, se trasladan a la que iba a ser su casa para siempre, la de Pelúgano, donde nace la pequeña, Eva, y en la que continúa viviendo.
Ramona tiene cuatro hijos y un marido que trabaja en la mina. No tiene lavadora, ni frigorífico, ni lavavajillas, ni dispone de una tienda cercana donde comprar la leche y la carne. Por lo tanto, Ramona lava, peina y educa a sus hijos; atiende y mima a su marido; ordeña las vacas y limpia el establo, «tresnando» [trabajando] cada día sin descanso, pues los animales no distinguen los días laborables de los fines de semana; cultiva la huerta y recoge la cosecha; atiende a los «gochos» criándolos gordos y fuertes para que den buena carne, por el verano, va a la hierba, convirtiéndose en una especialista en hacer «les vares de hierba»… y, cuando su marido decide que deben ir a Alemania a trabajar, como buena esposa, le acompaña, trabajando sin descanso para ahorrar el dinero que tan necesario era para sus tres hijos, que están con la abuela en Asturias. Viven en Essenborgue, donde ella trabaja en la cadena de producción de una fábrica del sector automovilístico, pero el hijo mayor enferma y Ramona, regresa inmediatamente, volviendo a su vida como madre de familia y mujer campesina.
Ramona es muy guapa. Sus ojos son azules y alegres, y su piel no muestra los estragos del trabajo. Se «arregla el pelo» ella misma, recordando los tiempos en los que también ejercía de peluquera para las vecinas del pueblo. Nos cuenta su vida sin darle importancia, segura de que hizo tan sólo aquello a lo que estaba obligada por las circunstancias, al igual que tantas y tantas mujeres del campo. A sus setenta y dos años, sigue llevando la casa, atendiendo al marido, cultivando la huerta, cuidando unas pocas vacas que permanecen con la familia; en su vida, nunca disfrutó de vacaciones. Al menos, ahora, acude con Antonio a Ledesma (Salamanca), donde descansa y lo pasa muy bien.
Además de guapa, Ramona es feliz. Es admiradora del actor Imanol Arias, y de los cantantes Juan Pardo y Manolo Escobar; también le distraen mucho las «novelas» de la televisión. Sin embargo, hay un momento en el que a Ramona se le iluminan especialmente los ojos, y es cuando habla de sus cuatro hijos, nietos y bisnietos, que la miman y rodean, disfrutando de su cariño y de los laboriosos «panchones» que prepara esta mujer, a la que la Asociación de Mujeres Campesinas de Asturias (AMCA) decide homenajear nombrándola «Abuela campesina del año 2010», recibiendo de dicho colectivo este galardón, por su dedicación a la vida rural, el día 14 de marzo del mismo año en un acto celebrado en San Cucao de Llanera al que acuden más de 800 personas entre autoridades, asociadas de AMCA, familiares, amigos...
Fuente: Asociación de Mujeres Campesinas de Asturias.
Concejo de Aller
Extensa tierra de cumbres y de bosques, de caza, de berrea, de tránsito hacia la meseta, de esquí y de ciclismo, de pastoreo y carbón. Así es Aller, hoy y siempre.
Los concejos (municipios) que limitan con el Concejo de Aller son: Caso, Laviana, Lena, Mieres y Sobrescobio. Cada uno de estos concejos (municipios) comparte fronteras geográficas con Aller, lo que implica que comparten límites territoriales y pueden tener interacciones políticas, sociales y económicas entre ellos.
Comarca de la Montaña Central
Corazón de la Cordillera Cantábrica con cumbres y puertos que traen a la memoria gestas heroicas; vías romanas y camino de Santiago; escondite idílico de Reliquias; aldeas de ensueño; templos Patrimonio de la Humanidad; estaciones de esquí; minería, patrimonio industrial y un Parque Natural que es Reserva de la Biosfera.
La comarca está conformada por uno o varios concejos (municipios). En este caso: Aller, Lena, Mieres, Morcín, Ribera de Arriba y Riosa. Los concejos representan las divisiones administrativas dentro de la comarca y son responsables de la gestión de los asuntos locales en cada municipio.
Conocer Asturias
«La sidra de Asturias es una bebida emblemática y tradicional de la región, que ha cautivado los paladares de los asturianos y ha trascendido fronteras para convertirse en una delicia apreciada en todo el mundo. Con una historia que se remonta siglos atrás, la sidra asturiana ha perdurado como símbolo de la cultura y la identidad de esta tierra llena de encanto.»
Resumen
Clasificación: Reseñas históricas
Clase: Geografía e historia
Tipo: Campesinos
Comunidad autónoma: Principado de Asturias
Provincia: Asturias
Municipio: Aller
Parroquia: El Pino
Entidad: Pola del Pino
Zona: Centro de Asturias
Situación: Montaña de Asturias
Comarca: Comarca de la Montaña Central
Dirección: El Pino
Código postal: 33687
Web del municipio: Aller
E-mail: Oficina de turismo
E-mail: Ayuntamiento de Aller
Dirección
Dirección postal: 33687 › El Pino • Pola del Pino › El Pino › Aller › Principado de Asturias.
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